El conflicto sirio se traduce en una catástrofe cultural para la Humanidad
“La situación del patrimonio cultural sirio es catastrófica”, aseguró la arqueóloga libanesa Joanne Farchakh, quien también investigó las destrucciones y saqueos en Irak (centro de la cultura sumeria), tras la invasión estadounidense de 2003. “En lo que se refiere a antiguas iglesias, viejas casas y calles de Homs, olvídense de ellas; ya no existen”, añadió. Según el diario The Independent, monumentos y museos de Damasco, la capital, y de Alepo, la segunda ciudad en importancia, son sometidos a saqueos a gran escala. Los ladrones también se robaron el mosaico romano de Apamea, rompiendo el suelo con máquinas viales. Según arqueólogos sirios, también fue destruido el templo asirio de Tell Sheikh Hamad, así como el muro y las torres del castillo Al Madiq, una fortaleza de los cruzados en el Levante.
El monasterio de Sednay (fundado por el emperador Justiniano, donde los habitantes aún hablan arameo, la lengua de Jesús), la mezquita Umayyad en Deraa, las ruinas de Bosra y los edificios de la época bizantina en Al Bara, Deir Sunbel y Ain Larose, en el norte del país, figuran entre los innumerables monumentos históricos destruidos y saqueados desde el inicio de conflicto interno en Siria.
Y el colmo de todas las barbaridades fueron las destrucciones causadas al castillo Krak des Chevaliers (antiguo baluarte de los cruzados), calificado por Lawrence de Arabia como “quizás, el mejor conservado y más admirable del mundo”. Es el mismo castillo que no lo logró tomar por asalto Saladino, quien derrotó a los cruzados en el Siglo XII.
Con información de Actualidad
©2012-paginasarabes©