El emir de Qatar abdica en su hijo
El emir de Qatar, Hamad bin Jalifa al Thani, de 61 años, ha anunciado en un mensaje en televisión que entregará el poder del país a su hijo el príncipe heredero, el jeque Tamim, de 33 años.
“Declaro que traspaso el poder al príncipe Tamim bin Hamad al Zani. Estoy seguro de que está a la altura de esta responsabilidad”, anunció el jeque Hamad en un discurso a la nación.
En su discurso, el emir, que gobierna desde 1995, ha asegurado que “ha llegado el momento de abrir una nueva página” y “asignar responsabilidades para la próxima generación” .
En este sentido, el emir ha insistido en que “nuestros jóvenes han demostrado en los últimos años que son un pueblo con determinación y fortaleza, capaces de acomodar el espíritu a su tiempo, a la plena realización y a sus necesidades, para hacer frente a los desafios y, sobre todo contribuyendo con su pensamiento original y creativo”.
“Dios Todopoderoso es consciente de que nunca he deseado el poder por el poder, ni he antepuesto lo personal por encima del interés de la nación, y el interés ha dictado que abramos un nuevo capítulo”, dijo el ya emir saliente.
El emir no especificó cuándo el cambio entrará en vigor pero un funcionario qatarí aseguró que, una vez anunciado, entraría en vigor inmediatamente.
El emir y el príncipe heredero recibirán a lo largo del día de hoy, que ha sido declarado fiesta nacional, y de mañana, miércoles, a los ciudadanos qataríes que deseen jurar lealtad al nuevo jefe de Estado.
El jeque Hamad aseguró en su alocución que a partir de ahora desempañará “una nueva posición”, sin especificar concretamente cuálés serán sus funciones ni su ocupación.
Además, instó a sus ciudadanos a “preservar los valores tradicionales y culturales” de su país, del mundo árabe y de la religión islámica.
Una política pragmática
Durante la mayor parte de su Gobierno, Qatar adoptó una política pragmática, que ha cultivado las relaciones con países y grupos de todo el espectro político.
Ha mantenido estrechas relaciones con Estados Unidos, que durante décadas ha despegado aviones de guerra de su base militar en Qatar. Pero también ha construido lazos cordiales con Irán, que la mayoría de los países vecinos de Qatar han valorado como una seria amenaza. Y es que los dos países comparten el control del mayor yacimiento de gas natural en el mundo.
Ahora se espera que su sucesor continúe con esta política, aunque algunos analistas han descrito al nuevo emir más conservador en el temperamento que su padre, lo que plantea algunos interrogantes sobre la dirección que el país va a tomar durante su reinado.
Sin embargo, otros dicen que tiene una personalidad liberal más propensa a escuchar las demandas de los jóvenes qataríes que deseen una reforma política, o que están preocupados por los estrechos lazos del país a los Estados Unidos y su apoyo a los levantamientos en Libia y en Siria.
“Su visión del mundo es muy similar a la de su padre”, dijo una fuente diplomática que pidió no ser identificado. “Él siempre está relajado, de buen humor, afable. También es muy pragmático. Si hay un problema, trata de resolverlo”, añade.
En el pequeño país árabe se especulaba desde hacía semanas con la salida del poder del emir por razones de salud. Qatar es un pequeño país de sólo 2 millones de ciudadanos, pero es el mayor exportador mundial de gas natural licuado, una potencia global de inversiones y un respaldo financiero de las revueltas de la primavera árabe.
De hecho, Qatar ha surgido como un fuerte partidario de los rebeldes en Siria, pese a los esfuerzos del emir, hace tan sólo unos años, para cultivar los lazos con el presidente sirio Bashar al-Assad.
Frente al golpe palaciego que dio en 1995 el actual emir para deponer a su padre, la estrategia del jeque Hamad ha pasado esta vez por colocar al frente del país a su hijo Tamim sin armar revuelo.
El príncipe ya fue designado heredero del emirato el 5 de agosto de 2003, cuando su hermano mayor, el jeque Yasim, renunció en su favor, y desde entonces ha tenido una agitada agenda internacional como parte de su preparación.
Más conocido por haber comprado el club francés Paris Saint Germain o impulsado el Mundial de fútbol en su país en 2022, ese joven apasionado de los deportes acumula cargos como el de subcomandante en jefe de las Fuerzas Armadas o presidente del consejo de directores de la Autoridad de Inversiones de Qatar.
El segundo hijo de la jequesa
Nacido el 3 de junio de 1980 en Doha, el príncipe Tamim es el cuarto hijo del emir Hamad, y el segundo que este tuvo con la jequesa Moza.
Tamim recibió una cuidada educación británica desde la secundaria y se graduó en 1998 en la prestigiosa academia militar de Sandhurst.
Ha representado a su país en un buen número de viajes oficiales, sobre todo a otros países de la región, y durante su intervención en foros internacionales no ha dudado en defender las revoluciones democráticas árabes.
En su nuevo papel, Tamim deberá continuar con el proyecto iniciado por su padre, que sacó al país de su tradicional aislamiento internacional para darle una nueva dimensión como mediador en la cuestión palestina y patrocinador de la primavera árabe.
Convertido en un actor clave en la región, Qatar es un pequeño país rico en recursos energéticos que ha ganado influencia en los últimos años gracias al canal televisivo Al Yazira, el primer canal de noticias por satélite del mundo árabe.
Casado con dos mujeres y padre de seis hijos, su presencia en cumbres y conferencias no le ha impedido gestionar sus grandes intereses económicos en multinacionales ni cultivar sus dotes deportivas.
Miembro del Comité Olímpico Internacional (COI) desde 2002 y presidente del de su país, Tamim es un declarado aficionado al fútbol, la natación, y el tenis, deporte en el que incluso llegó a representar internacionalmente a Qatar.
Para el analista del Centro Al Ahram de Estudios Políticos y Estratégicos Mohamed Ezz el Arab, el anuncio del traspaso de poder en Qatar “no es una sorpresa y venía preparándose desde hacía más de dos años por lo débil que está la salud del emir”.
Asimismo, destacó que Tamim está ya al cargo de materias exteriores e interiores como las relativas a la seguridad, y es “muy probable” que su padre siga ejerciendo el poder hasta que culmine el traspaso de los principales asuntos del emirato.
Con información de El Mundo
©2013-paginasarabes®