El hombre ha nacido para contemplar las obras de Dios
El Gran Obrero ha hecho al mundo, no con sus manos, sino con su Palabra. Tienes que representártelo como presente y siempre existente, como el autor de todo, el Uno y el Solo, el que ha creado los seres por su voluntad. Su cuerpo no es tangible, ni visible, ni mensurable, ni extenso, ni parecido a ningún otro cuerpo. No es el fuego, ni el agua, ni el aire, ni el espíritu, pero todo viene de El. Siendo bueno, ha querido crear el mundo por Sí mismo y adornar la tierra. Como adorno del cuerpo divino ha colocado al hombre, animal inmortal y mortal. El hombre domina sobre los animales por razón y la inteligente. Ha nacido para contemplar las obras de Dios, admirarlas y conocer a su Autor. Dios ha distribuido la razón a todos los hombres, pero no la inteligencia; no es que la haya enviado a algunos, pues la envidia le es ajena, ella nace en las almas de los hombres que no tienen inteligencia. (HT)
©2013-paginasarabes®